lunes, 16 de septiembre de 2013

MERCADEO - EMPRENDIMIENTO


INTRODUCCIÓN.
para dar inicio a tema de mercado y empresas vamos a tener en cuenta la revolución industrial.

LA REVOLUCIÓN INDUSTRIAL.

HISTORIA UNIVERSAL.

La expresión o termino Revolución Industrial fue difundida a partir del año 1845, por el comunista Federico Engels uno de los fundadores del socialismo científico, para designar al conjunto de transformaciones técnicas y económicas que caracterizaban a la sustitución de la energía física por la energía mecánica de la maquinas, el cambio a la producción manufacturera por la fabril en el proceso de producción capitalista.

- ¡ esta revolución se dio primero en el continente europeo; en algunos países como: Inglaterra; en la supremacía naval inglesa y de igual manera en la creación de maquinas de coser o de hilar, maquinas de vapor y entre otras cosas ! -

Entre los diversos factores que fueron el origen del proceso de industrialización, tres merecen mención especial: La Revolución Comercial en Europa, la acumulación primitiva de capital y la aparición de avances tecnológicos (maquinas). La causa mas importante para el desarrollo de la Revolución Industrial fue la aparición de maquinas de vapor, el telar mecánico, las maquinas de hilar que revolucionaron el siglo XVIII las técnicas de producción industrial. A partir de ahí ocurrió el auge de la industria fabril. La Primera Revolución Industrial se desarrollo en primer en Inglaterra y luego se difundiría en el continente europeo. Factores que condicionarían el surgimiento de la Revolución Industrial en Inglaterra:


Inglaterra, la pionero en la revolución industrial: Los grandes capitales acumulados durante la Revolución Comercial ayudaron a Inglaterra a impulsar la revolución industrial, a emprender grandes manufactureras.
- La supremacía naval inglesa: La ascensión de Inglaterra (después del declino del poderío holandés) a posición de la "Reina de los mares", le confirió el dominio del comercio mundial permitiendo organizar un inmenso imperio colonial.
Instauración de la Monarquía Parlamentaria: La Revolución Gloriosa de 1688 y de 1689 establecieron en Inglaterra la supremacía del parlamento sobre la monarquía.
- El triunfo de la ideología liberal: Las revoluciones intelectuales de los siglos XVI y XVII marcaron la victoria del liberalismo en Inglaterra.  



- La disponibilidad de mano de obra: En los siglos XVI y XVII los nobles ingleses, apoyados por su poder absoluto expulsaron a los campesinos de sus tierras comunales y se apoderaron de ellas , transformando en pastizales de crianza de ovejas para aprovechar su lana. Ese proceso fue conocido como el "cercamientos de los campos" que provoco un gran migración de mano de obra del campo para la ciudad.




LA TRASFORMACION AGRARIA.

Al mismo tiempo que tiene lugar en Inglaterra la revolución industrial, se produce en el  país una importante transformación agrícola que favorece, además, la industrialización. Vamos a ver en qué consisten estos cambios agrarios y cómo influyen sobre la industria. En Inglaterra existían las llamadas «tierras comunales». Se trataba de fincas grandes no pertenecientes a persona determinada, sino que eran propiedad de alguna comunidad: aldea, pueblo o ciudad cuyos vecinos se aprovechaban gratuitamente de ellas. Estas tierras comunales solían estar dedicadas a pastos o a  bosques, y permitían vivir a los más menesterosos: cualquier habitante del pueblo podía llevar su ganado a pastar en la tierra comunal y, de la misma manera, cualquier vecino, también gratuitamente, podía recoger leña del bosque común, bien para su uso, bien para convertirla en carbón y venderla después.
A mediados del siglo XVIII, esta situación cambió. El gobierno publicó una ley por la que se suprimían las «propiedades comunales». Así, estas tierras, que hasta entonces habían pertenecido a los pueblos, fueron sacadas a pública subasta y compradas por los más ricos: nobles u opulentos burgueses. El resultado, desde el punto de vista social y humano, fue desastroso: los campesinos pobres y los jornaleros sólo podían sobrevivir gracias a las «fincas comunales»; como ahora han desaparecido, no tienen más remedio, para no morir de hambre, que dejar el campo y trasladarse a la ciudad para trabajar como obreros en las nuevas fábricas que en esos momentos se estaban levantando.

SITUACION DEL PROLETARIADO

Acabamos de ver cómo al desaparecer las tierras comunales, muchos campesinos se trasladan a la ciudad. De esta manera, en las ciudades industriales se va acumulando una masa de personas en busca de trabajo. Esta abundancia de mano de obra es aprovechada por los dueños de las fábricas (los capitalistas industriales), que contratan a los obreros por salarios miserables. Así, la situación de estos trabajadores de fábricas es espantosa. El sueldo que reciben apenas les da para comer, visten de andrajos y habitan en inmundas chabolas a las afueras de la ciudad; están sometidos, además, a una jornada laboral agotadora que no baja de las 14 horas diarias. Para colmo, muchas veces los industriales, a fin de pagar todavía menos, lo que hacen es contratar a mujeres y niños. De esta forma la masa trabajadora se halla siempre hambrienta, y su vida media no suele superar los 40 años. Muchos matrimonios obreros no pueden alimentar a sus hijos y se ven obligados a abandonarlos en los orfelinatos. Estas instituciones se vieron tan sobrecargadas de niños, que comenzaron a venderlos a las fábricas, convirtiéndolos así en verdaderos esclavos que trabajaban sólo a cambio de la alimentación. Es todo ese mundo de miseria y de dolor que nos describe Dickens en su  novela «Oliver Twist».
   
EL LIBERALISMO ECONÓMICO

Es la doctrina elaborada por la burguesía para justificar su enriquecimiento y la miseria de la clase trabajadora.
Su principal representante es el economista Adam Smith que, en 1776, publicó su obra titulada “Investigación sobre la naturaleza y las causas de la riqueza de las naciones” En ella se defiende la teoría que el Estado debe mantenerse apartado de la economía del país, no debe fijar ni precios ni salarios, ni debe proteger a los obreros.  Los empresarios pueden actuar con entera libertad y como mejor le parezca. La misión del Estado es simplemente la de policía: mantener el orden público pero sin intervenir para nada en los asuntos económicos.
El lema del liberalismo fue “Dejar hacer, dejar pasar; el mundo va por sí mismo”. Naturalmente, al desentenderse el gobierno de las cuestiones sociales y económica al dejar a los obreros en manos de los empresarios que fijaban a su antojo los sueldos, la situación del proletariado fue empeorando continuamente, a medida que se desarrollaba la industrialización.

LAS CONDICIONES DE TRABAJO EN LA REVOLUCION INDUSRTIAL

Antes de la Revolución Industrial las personas elaboraban en sus casas la mayor parte de los objetos que necesitaban, o bien los encargaban a los artesanos que tenían sus talleres individuales.

Con la fundación de nuevas ciudades, creció la demanda de los productos elaborados por los artesanos y con esto la organización de los talleres: cada taller tenía un maestro, un oficial y varios aprendices, cuando el oficial aprendía a manejar todas las herramientas, dominaba la técnica y conocía los secretos de su oficio llegaba a ser maestro y podía establecer su propio taller. Cuando fueron muchos talleres los que producían el mismo artículo, se organizaron en gremios para ayudarse y protegerse mutuamente.

Cuando Inglaterra inició el periodo de preponderancia industrial sobre todas las demás actividades del país, los talleres artesanales no pudieron competir con la fábrica ya que ésta producía más aprisa y a menor costo el artículo que ellos hacían en mayor tiempo y a más alto costo. Los artesanos cerraron sus talleres y solicitaron empleo en las fábricas, en un trabajo inseguro y bajo condiciones higiénicas y económicas inferiores.

La industria textil y poco después la minera y la metalúrgica fueron las que iniciaron esta revolución industrial.

Inglaterra fue el país donde se reunieron las condiciones que hicieron posible esta revolución. Para la primera mitad del siglo XVIII, Inglaterra había logrado conjuntar un poderoso imperio con una gran cantidad de colonias, las que representaron amplios mercados a cubrir por la empresa inglesa, que para lograrlo debería incrementar su producción. Fue también importante en este proceso la creación de compañías mercantiles en Inglaterra, pues ellas controlaron las materias primas y los mercados coloniales, y, gracias a esta acción, que implicó el saqueo de los territorios dominados, se acumularon grandes capitales en la metrópoli, con lo que se apoyó el proceso de la Revolución Industrial.

En parte, el crecimiento de la productividad se produjo por la aplicación sistemática de nuevos conocimientos tecnológicos y gracias a una mayor experiencia productiva, que también favoreció la creación de grandes empresas en unas áreas geográficas reducidas. Así, la Revolución Industrial tuvo como consecuencia una mayor urbanización y, por tanto, procesos migratorios desde las zonas rurales a las zonas urbanas. Se puede afirmar que los cambios más importantes afectaron a la organización del proceso productivo.

Como la Revolución Industrial se produjo por primera vez en Gran Bretaña, este país se convirtió durante mucho tiempo en el primer productor de bienes industriales del mundo. Durante gran parte del siglo XVIII Londres fue el centro de una compleja red comercial internacional que constituía la base de un creciente comercio exportador fomentado por la industrialización.